dulce como la miel pero agria como la hiel

lunes, 28 de enero de 2008

home alone verano a solas


bueno, he de decir quer me cuesta un tanto escribir mi primer post de la historia asi que puede que salga tieso. para evitarlo y romper el hielo escribiré acerca de algo que estoy viviendo en este minuto.

Mi casa para mi sola, un gran caserón abandonado donde cada recinto es por una vez propio y no compartido. donde cada rincón se ve diferente sin gente llenándolo.

es una de las cosas que más me fascinan. creo que me gusta eso de estar sola, tener todo a tu haber y nadie a quien responder. amo esa sensación(aunque sea en su más micro expresión) de ser libre. que sea dentro de unos metros cuadrados bien acotados. pero es que no hay ojos frente de ti, no hay roces para pasar de un pasillo al otro, esperas para el baño, gritos no bienvenidos, retos desagradables. tu eres al fin el dueño de un pequeño mundo.

eso de hablar frente al espejo y bailarle y dps saltar las baldosas en zig zag de la sala de estar al living es simplemente perfecto. la fantasía de un castillo propio, aunque sea una vil mentira de unas horas o un finde donde tus viejos te dejaron a cargo.

otra de las cosas que me gusta es dejar todo tirado, sólo por poner la casa de una manera en que nunca se ve. es tener la posibilidad de adornarla de nuevo solo con tus usos. es como externalizar tu movimiento por el espacio y después ver sus vestigios. adoro depender solo y solamente de mi misma.

dejar los platos sin lavar al más puro estilo home alone de peliculoide gringo (sin la fiesta de rigor claro), abandonarse a un lugar colonizado temporalmente.

caminar en pelota por toda la casa solo por romper el cotidiano. increible

ojalá me dejaran más tiempo de ama llaves
la mejor de las terapias, recomendable